domingo, 20 de enero de 2019

dry


Hay fantasías labradas con hielo. Se deshacen al primer rayo de sol,
Que deja tras la quimera solo un charco.
Ciertos barcos de alma inquieta flotan en su vaivén impredecible.
Aman la orilla de su lago pequeño, anclados en la arena besan las olas.
Pero el agua no besa. Sólo envuelve… sólo seca.
Ciertas almas de prodigiosas barcas vuelan con los remolinos de la primavera.
Sabrán suspirar sin que nadie las oiga mientras danzan su tristeza de cielo fiel, erguido una vez más detrás del iceberg en el que aterrizan.

2 comentarios:

Federico J. B. dijo...

El agua no besa y es más bien como el roce de un gato con sueño.

Abrazos ultramarinos para usted.

Indalea dijo...

¡Waw! vine a releer esto... la noche hoy habla. Siento que todo el planeta respira aliviado. ¡Mirá las fechas! Qué lindo. Sé que algún día vas a leer esto y vas a sentir la sincronía trascendental del ahora. Suena Aquelarre... abrazo Fede <3